Las sales sin sodio, o 0% sodio, de venta en farmacias, o supermercados, efectivamente, no llevan sodio, pero este mineral es sustituido por potasio.
Se podría pensar que se trata de sales más sanas ya que no llevan sodio, el principal mineral relacionado con la hipertensión arterial, pero no es así. Como hemos dicho anteriormente, se sustituye el sodio (Na) por el potasio (K), pasando de NaCl (cloruro de sodio, sal común) a KCl (cloruro de potasio, sal sin sodio).

En la ERC este tipo de sal no está recomendada ya que existe el riesgo de que se produzca una acumulación de potasio en sangre (hiperpotasemia) porque este no puede ser eliminado a través de la orina y que los riñones no pueden realizar esta función. Este exceso de potasio puede ocasionar diversos síntomas como náuseas, vómitos, molestias abdominales o debilidad muscular.

En casos graves puede causar arritmias e incluso ataques cardíacos. En las personas con problemas de corazón, o que toman muchos fármacos, podría existir alguna contraindicación, por lo que en estos casos es preferible no incluir esta sal en la alimentación.

¿Qué más podemos hacer para evitar la sal o un exceso en las comidas?

Lo primero es evitar los productos ultraprocesados ya que suelen llevar cantidades grandes de sal, además de otros ingredientes de mala calidad como grasas, azúcares refinados y aditivos.
También deberemos evitar adicionar sal en exceso a las preparaciones. Para ello una buena alternativa es el uso de hierbas y especias para condimentar los platos.
Estos cambios deben ser progresivos para así ir educando al paladar y podernos adaptar sin grandes dificultades. Es preferible reducir poco a poco la sal hasta acabar utilizando solo hierbas y especias que pasar de usar mucha sal a no echar nada y abandonar este hábito al poco tiempo porque no nos gusta la comida tan “sosa”.
Además, es importante conocer los alimentos de consumo común más ricos en sal: quesos, pan (se puede cambiar a pan sin sal), embutido, salsas, snacks y aperitivos. Estos últimos los consideramos alimentos ultraprocesados por los que su ingesta habitual está desaconsejada.

Recuerda que tienes a tu disposición el servicio de nutrición de ALCER Castalia para resolver cualquier duda, llamando al 964.228.363.